Felicidad

La felicidad tiene muchos matices de significado dependiendo de quien haga referencia al término. 

Hay quien la considera un estado emocional de difícil acceso y corto deleite, que va ligada a factores externos, y que difícilmente podemos controlar. 

Otros, sin embargo,  han aprendido que no es más que una actitud de vida, un estado permanente de armonía interna que nos produce calma y bienestar, llenando cada momento de alegría y satisfacción.

Desde mi punto de vista el camino a la felicidad pasa por un trabajo personal que contempla cinco  aspectos básicos a tratar: gestión de las emociones, autoestima, relaciones sociales, gestionar el tiempo y por último gestionar los factores externos. 

Podríamos resumir todos estos aspectos en un decálogo de "modus vivendi" hacia la felicidad.

Atención plena. Entrar en contacto con nosotros mismos, con el presente. Prestar atención a lo que nos envuelve, y aprender a mirarlo con los ojos de la pausa, sin prisas y saboreando cada momento, se torna una actitud imprescindible si queremos conseguir gestionar nuestro tiempo y obtener bienestar.

Optimismo. Aprender a ver el lado positivo de las cosas y entender que toda situación tiene mucho que ver con nuestra actitud ante la vida, es un aspecto de suma importancia, sobretodo en un mundo donde las polaridades impregnan nuestras vidas.

Cuidar nuestro cuerpo. Con ejercicio y alimentación sana conseguimos aportar a nuestro cuerpo la energía positiva que necesita y esto, a su vez, nos ayuda a elevar nuestros niveles de endorfinas y en consecuencia reduce el estrés y eleva nuestra autoestima

No juicios . Nadie será como tu quieras que sea, sino como es. Saber respetar la riqueza de la diferencia nos ayuda en gran medida a no juzgar a nadie (incluidos nosotros mismos).

No críticas. Entender que no existe una sola verdad, que esta es subjetiva y que cada cual ve el mundo desde sus vivencias internas y externas, hace que nada ni nadie pueda ser criticado.

Altruismo. Dar sin esperar nada a cambio produce un sentimiento de pertenencia a un todo que aporta mucho más de lo que se da.

Compasión. Entendida como la comprensión de la diferencia, de la situación y del camino de aprendizaje de cada uno.

Amor. En general por todas las cosas y seres vivos que habitan a nuestro alrededor. Todo está interrelacionado, y el respeto fuera es el reflejo del respeto hacia nosotros mismos.

Metas personales. Conseguir trazarse pequeños retos vitales, objetivos que nos motiven, nos ilusionen y nos llenen de alegría, energía  y satisfacción, hacen que nos sintamos realizados y vivos.

Relaciones positivas. Cuidar las relaciones sociales, aquellas que nos aportan energía y nos suben el ánimo, es una dosis de positividad que nos ayuda a una sana autoestima y nos eleva a niveles altos de bienestar.